GRUTA DEL SANTO JERÓNIMO Esta ruta que queda relativamente cerca del casco urbano del municipio de San Jerónimo, consta de un paseo por una de las veredas Guayacán, La Lince y Quimbayo, zona caracterizada por la fuerte presencia de fincas de recreo. Por la carretera que las comunica se transita hasta llegar a una casa tradicional de tapia, donde su propietaria realiza labores manuales de alfarería. En este trayecto se puede hacer un desvío para visitar el sitio donde se descubrió en siglos pasados la imagen de San Jerónimo a la orilla de la quebrada Los Cedros. Como complemento a esta travesía, se puede visitar la Hacienda de Juan del Corral, propiedad que pertenece a una sociedad privada y que ostenta una llamativa arquitectura colonial.
Plan ecoturístico: Ruta para cabalgar y recorrer una zona de fincas de recreo, pasar por un lugar considerado hito religioso del municipio de San Jerónimo y visitar la Hacienda Juan del Corral, la cual posee con valor histórico y arquitectónico.
Imagen del recorrido.
CARACTERÍSTICAS GENERALES Distancia total (km): 9,2 Tiempo promedio del recorrido: 1 hora (V) Rangos de altitud min. - máx. (m.s.n.m.): 700-850 Pendiente máxima (%): 54 Longitud del trayecto de mayor pendiente (m): 130 Pendiente promedio (%): 18 Grado de dificultad (1-10): 3 C: caminando, Ca: cabalgando y V: en vehículo. SITIOS DE INTERÉS La quebrada Los Cedros donde se encontró hace tiempo la gruta que contenía la imagen del Santo Jerónimo. La casa de las hermanas Arias, vereda Quimbayo, donde se hacen aún algunas ollas en barro. Hacienda Juan del corral, construcción que conserva sus rasgos coloniales Las fincas de recreo con sus jardines, árboles y piscinas. Estos predios gozan de vegetación de gran porte que les otorga especial valor. DESCRIPCIÓN DEL CIRCUITO Este itinerario se puede hacer caminando, en cabalgata o vehículo y se parte del parque de San Jerónimo (Punto 1-Imagen del recorrido-) hacia la antigua vía al mar o vía Palmitas (Punto 2-sector de las fruteras-), después se toma la carretera que entra hacia la vereda Guayacán, mientras se contemplan hermosas acacias rojas (Delonix regia) que se encuentran a los lados de las vías. Después de un corto tramo en cemento y luego en balastro se llega a una ye donde hay un sendero que conduce hacia la quebrada Los Cedros (Punto 3). Este camino asciende suavemente hasta una colina desde donde se puede apreciar una bella visual de un sector de fincas de recreo, así como el casco urbano del municipio de San Jerónimo. Pasado este lugar, se sigue en descenso entre un bosque de galería con árboles de gran porte como piñones de oreja (Enterollobium cyclocarpum), samanes (Albizzia saman), suribios (Pithecellobium longifolium), higueras (Ficus sp.) y los comunes indio desnudo (Bursera simuaruba) que con su follaje generan una sombra refrescante. Cuenta la leyenda que en este punto existía una pequeña depresión en el terreno en la cual fue encontrada la imagen del patrono del municipio y desde ese momento este sitio ha adquirido cierta connotación a nivel municipal como lugar de devoción y peregrinación para algunos que creen que las aguas de la quebrada tienen poderes de sanación gracias al santo o como destino de caminatas para otros. No obstante, en este momento el lugar está completamente deteriorado y espera una restauración por parte del municipio Al regresar a la vía carreteable se puede continuar hacia a la vereda La Lince- Quimabayo hasta llegar a una casa donde se hace alfarería (Punto 6). Dicha tradición está a punto de perderse ya que las personas encargadas de la elaboración de estos objetos han dejado paulatinamente de hacerlo por su avanzada edad, con el agravante que no hay una transmisión de este conocimiento. Estas artesanías tradicionales en barro están compuestas por ollas, tinajas, cayanas y objetos decorativos, de gran reconocimiento a nivel local. Estas labores son realizadas por alfareras como es el caso de las hermanas Arias, quienes aprendieron y heredaron esta bello arte de las generaciones pasadas., fabricando las piezas de manera poco tecnificada y a baja escala (ocasional) para ser comercializadas en la plaza de mercado o por encargo. El regreso hacia el casco urbano desde la vereda Quimbayo puede hacerse por el mimo camino o bien tomar en una ye (Punto 7) un carreteable que llevará a los visitantes hasta salir por los alrededores del Hotel Quimbaya (Punto 8) y así, de nuevo a la vía al mar y retomar por la misma hacia el último destino de esta correría que es la visita a la Hacienda Juan del Corral. Luego de pasar de nuevo por las fruteras nuevamente, pero esta vez se sigue como quien va hacia Santa Fe de Antioquia por la vía vieja. De esta forma se pasa por la zona donde se concentran las actividades de turismo recreativo: hosterías y hoteles, numerosas fincas y parcelaciones de recreo; hasta llegar al sector donde anteriormente se encontraba le punto de venta de Pakita (Punto 9), sitio desde el cual se sigue a mano derecha por una carretera asfaltada que lleva directamente hasta las puertas de la propia hacienda (Punto 10). Al llegar a la hacienda, el visitante podrá contemplar una arquitectura de época más o menos bien conservada, pero un tanto subutilizada. La Hacienda Juan del Corral pertenece al sector conocido como el Hato, vereda Llanos de Aguirre. En la actualidad el terreno donde se localizo esta gran hacienda se encuentra parcelado en una unidad cerrada con fincas de recreo, viéndose alterada gran parte de su estructura original especialmente los sectores aledaños a la casa principal, donde se ha adaptado una piscina, una cancha de tenis y una serie de adecuaciones para el disfrute de los propietarios de las fincas, funcionando como un centro de recreo comunal del conjunto campestre. La construcción se caracteriza por la distribución de los espacios y amplitud, con grandes habitaciones de balcones hacia los corredores, piso en tierra o ladrillo dependiendo del uso del espacio (esclavos, sirvientes o patronos), de puertas y ventanas en madera, puertas principales en barandas y accesorios en hierro forjado. La casona con amplios corredores y jardines es un tesoro histórico, arquitectónico y cultural que debe ser recuperado para el deleite público o bien, para la realización de actividades propias de un centro de convenciones o para eventos de tipo cultural y pedagógico. Aparte de la casa principal, se puede acceder a otros espacios de la casa constituidos por una fonda, que atiende en horario de fines de semana a los visitantes que llegan de la parcelación contigua, un encierro para equinos que conserva portones de gran belleza, amplios patios y zaguanes con abundante agua (fuentes y acequias), algunos pertrechos de época como muebles, cuadros y herramientas colgadas de sus paredes y como se dijo anteriormente, una gran piscina que contrasta y altera su estilo. RECOMENDACIONES: - Usar zapatos adecuados, protector solar, hacer uso de la quebrada bajo riesgo personal, movilidad reducida para personas con limitación o impedimentos físicos.
- Se recomienda hacer el recorrido con guía profesional u operador turístico que garantice la experiencia y asegurabilidad de los visitantes.
- La administración municipal no se hace responsables por accidentes o daños a terceros, vivir esta experiencia es bajos su propia responsabilidad.
CONTACTOS DE EMERGENCIA: - Hospital San Luis Beltrán: 8582020.
- Policía Nacional: 8582040.
- Bomberos: 8580096. Celular. 3235057984.
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